Los contaminadores del Reino Unido enfrentarán multas ilimitadas para reforzar la protección del medio ambiente

Las empresas contaminantes, como las del agua o la energía, que ensucien los ríos y mares del Reino Unido o viertan residuos se enfrentarán a penas ilimitadas y sanciones más duras, según la ampliación de la legislación gubernamental anunciada el miércoles.

"Vamos a eliminar el límite máximo de las sanciones civiles y a ampliar considerablemente su alcance para abarcar una gama mucho más amplia de delitos, desde el incumplimiento de los permisos de desbordamiento de aguas pluviales hasta el vertido imprudente de residuos peligrosos", declaró la secretaria de Estado de Medio Ambiente, Thérèse Coffey. El límite actual es de 250.000 libras (equivalente a US$ 323.625).

Anteriormente, las sanciones más elevadas, como la multa de 3,3 millones de libras impuesta a Thames Water Ltd. por aguas residuales en ríos cercanos al aeropuerto de Gatwick a principios de este mes, sólo podían imponerse cuando los incidentes pasaban por la vía penal. Aunque los nuevos poderes permitirán multas más rápidas, los incidentes más graves seguirán pasando por los tribunales penales, dijo la Agencia de Medio Ambiente.

"Un régimen político/regulatorio más estricto se está cerrando sobre el sector del agua británico, ante la planificación del próximo periodo regulatorio, presionando al alza los riesgos asociados y el coste de los recursos propios", declaró Ahmed Farman, analista de renta variable de Jefferies.

La legislación es consecuencia de una consulta del Ministerio de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales, que examinó la contaminación de los ríos y mares del Reino Unido con aguas residuales sin tratar. El "Plan para el agua" del gobierno pretende reforzar la regulación e impedir que las empresas acepten multas en lugar de pagar los elevados costes de depuración de sus aguas residuales.

Los defensores del medio ambiente ya han acusado a empresas del sector del agua como Thames Water Plc de endeudarse en exceso para financiar grandes dividendos y primas a los ejecutivos en lugar de invertir más en las infraestructuras, a menudo anticuadas, del sistema. Los inversores de Thames Water Plc, la mayor empresa de suministro de agua del Reino Unido, han acordado añadir 750 millones de libras en fondos propios para ayudar a evitar una absorción temporal por parte del gobierno.